Los "Tres Testigos" del Libro de Mormón

Por Richard Packham

    Al inicio de todas las copias del Libro de Mormón encontrará "El Testimonio de los Tres Testigos," firmado por Oliver Cowdery, David Whitmer y Martin Harris:

CONSTE a todas las naciones, tribus, lenguas y pueblos, a quienes llegare esta obra, que nosotros, por la gracia de Dios el Padre, y de nuestro Señor Jesucristo, hemos visto las planchas que contienen esta relación, la cual es una historia del pueblo de Nefi, y también de los lamanitas, sus hermanos, y también del pueblo de Jared, que vino de la torre de la que se ha hablado. Y también sabemos que han sido traducidas por el don y poder de Dios, porque así su voz nos lo declaró; por tanto, sabemos con certeza que la obra es verdadera. También testificamos haber visto los grabados sobre las planchas; y se nos ha mostrado por el poder de Dios y no por el de ningún hombre. Y declaramos con palabras solemnes que un ángel de Dios bajó del cielo, y que trajo las planchas y las puso ante nuestros ojos, de manera que las vimos y las contemplamos, así como los grabados que las contenían; y sabemos que es por la gracia de Dios el Padre, y de nuestro Señor Jesucristo, que vimos y testificamos que éstas cosas son verdaderas. Y es maravilloso a nuestra vista. Sin embargo, la voz del Señor nos mandó que testificásemos de ello; por lo tanto, para ser obedientes a los mandatos de Dios, testificamos de estas cosas. Y sabemos que si somos fieles en Cristo, nuestros vestidos quedarán limpios de la sangre de todos los hombres, y nos hallaremos sin mancha ante el tribunal de Cristo, y moraremos eternamente con Él en los cielos. Y sea la honra al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo, que son un Dios. Amén.

    Muchas personas que encuentran razones para dudar del Mormonismo; por varias razones, a veces tienen dificultades con estos testimonios. Parecen tan sinceros y directos. Y, remarcablemente, aun que cada uno de estos hombres terminó desilusionado con José Smith y su iglesia, no existe una evidencia física de que alguno de ellos diera marcha atrás en su testimonio en los años que siguieron. Así que este documento demanda alguna explicación, si es o no aceptable como prueba de autenticidad del Libro de Mormón.

    Randy Jordan señala que además existieron otros "testigos" de eventos que sucedieron ese día y que tienen que ver con la aparición del Libro de Mormón y su "traductor": esos vecinos y conocidos de José Smith realizaron declaraciones juradas en la década de 1820 y fueron recopiladas por Philastus Hurlbut y publicadas en el libro Mormonism Unvailed [sic] en 1834. Tal como Jordan dice:
Los Mormones aseguran que los "testigos del Libro de Mormón" nunca se arrepintieron de su "testimonio". Sin embargo, ni uno solo, entre las casi sesenta testigos que Hurlbut recogió, se arrepintió. Y eso tomando en cuenta que algunos de ellos vivieron hasta finales de siglo y tuvieron una amplia oportunidad de hacerlo. Los testigos de Hurlbut juraron sus testimonios y lo realizaron de manera legal, a diferencia de los "testigos del Libro de Mormón". Entonces que testimonios son más creíbles? Aquellos que tienen un valor legal, o aquellos que se hicieron para vender libros?

Esos testigos que fueron entrevistados por Hurlbut, consistentemente describían a Smith como alguien que conseguía dinero al convencer a granjeros incautos de que el podía encontrar tesoros enterrados en sus tierras, por medio de sus poderes mágicos y su "piedra para ver" (la misma piedra que después aseguraba había utilizado para realizar la traducción de las placas sagradas de oro).

    Yo sé un poco acerca del hipnotismo, auto hipnotismo y "estados alterados de conciencia". Las técnicas para inducir a un estado hipnótico o semi hipnótico en un tema específico son fáciles de aprender, y algo sencillas. El hipnotista sugiere el estado físico propicio (usualmente relajado), y después da sugestiones hipnóticas. Se ha encontrado también que mirar hacia arriba (o mirar dentro) como sucede en las plegarias o al mirar a un andel que baja, aumenta la sugestibilidad de una persona. El sujeto puede mantener un estado de consciente, aun mientras alucina con las sugerencias del hipnotista.

    Yo he hecho esto. Y he visto que otros lo hacen. Por ejemplo, una vez vi a un hipnotista amateur reunir a un grupo de cerca de 20 personas en una fiesta para hablar acerca del hipnotismo. En unos pocos minutos, y sin advertencia alguna, sólo hablando acerca del hipnotismo, había logrado hipnotizar a cerca del 80% de las personas que lo escuchaban. Los sugestionó para creer que una parvada de aves estaba volando sobre sus cabezas (estando todos dentro de la habitación, cabe recordar) y defecando sobre sus cabezas. Inmediatamente todos empezar a cubrir sus cabezas de manera frenética con sus manos, limpiándose y haciendo sonidos de disgusto. Después los sugestionó para que creyeran que estaban viendo la película más triste que hubieran visto en su vida. Las personas inmediatamente empezaron a sollozar, algunos a llorar y a temblar de la emoción. Entonces los sugestionó haciéndolos pensar que estaban viendo la película más graciosa que hubieran visto, inmediatamente empezaron a doblarse de la risa, caer de las sillas, etc.

    Por supuesto que José Smith no era un hipnotista entrenado. El fenómeno apenas empezó a recibir atención una pocas décadas antes, cuando Mesmer empezó a estudiarlo, llamándolo "magnetismo animal". Pero no hay duda, yo pensaría que los sacerdotes, magos, hechiceros y otros tipos carismáticos han descubierto ya sea por accidente, por prueba o error, así mismo como muchas técnicas para inducir a un estado hipnótico. José Smith era carismático, hechizante, de acuerdo con todos los que lo conocieron.

    La situación de los Tres Testigos era ideal para una ilusión o "visión" inducida hipnóticamente. Cowdery pudo haber sido un cómplice, dado que estuvo involucrado con Smith casi desde un principio. (Y además parece, basándose en una investigación reciente, aun no publicada, que la participación de Cowdery empezó antes de lo que se sospechaba en un principio).

    No veo ningún problema con el hecho de que ninguno de ellos negara su testimonio, incluso si todos ellos dejaron la iglesia. Hay dos explicaciones plausibles (escoja la que le guste), ninguna de ellas requiere que concluyamos que debieron haber visto un ángel. Hay que recordad también que lo más que su testimonio firmado puede probar es que ellos creyeron haber visto un ángel. No es necesario que nadie crea tal testimonio, eso es, aceptar como una prueba concluyente que, de hecho, ellos vieron un ángel, ya sea en la corte o la vida real. Que ellos realmente hayan visto el ángel es un tema distinto.

    Explicación 1: Tal como muchos críticos han sugerido, cualquier hombre (incluso uno honesto) odia admitir que ha sido desorientado y caído en confusión, o que ha mentido sobre un juramento, o que ha cooperado para el engaño de miles de personas que creyeron en ellos. Es más fácil, causa menos problemas, solo alinearse a la historia original. (Probablemente hay autoridades generales y miembros de la facultad de BYU que podrían ser considerados como ejemplo de esta actitud.)

    Explicación 2: Una alucinación inducida por hipnotismo es muy real. Tal como cualquier alucinación, sólo puede identificarse como una alucinación por alguien más que no fuera la persona que estaba alucinando. Si la persona que tiene la alucinación reconociera que fue una alucinación, ya sea en ese momento o más tarde, no sería una alucinación. Es muy difícil convencer a una persona que alucinó de que su experiencia no fue real. Yo pienso que los testigos tuvieron una alucinación compartida que fue tan real que ellos pensaron que era verdadera por el resto de sus vidas (esta explicación no aplica para Cowdery).

    Los defensores del mormonismo contradicen la hipótesis de la alucinación diciendo que las alucinaciones conjuntas son imposibles, es decir dos o más personas que tienen la misma alucinación en el mismo momento. Estrictamente hablando, eso es probablemente verdadero. Pero no es una objeción válida aquí, porque nosotros no estamos sugiriendo que los testigos vieron exactamente lo mismo. Cada uno tuvo una alucinación individual que sólo compartía similitudes generales con el resto. No tenemos detalles de como se veía el ángel (cabello castaño, largo, o corto negro, vestiduras cortas o largas, descalzos o con sandalias, etc.). Ellos vieron y escucharon lo que les fue sugestionado: un ángel sosteniendo las placas de oro, una voz diciéndoles que los escritos eran reales y mandándolos a compartir el testimonio. Un testigo pudo oír "Ve y comparte el testimonio de que este compendio es real!" pero otro pudo haber escuchado: "Yo testifico ante ti que este es el trabajo de Dios, y que es un compendio real; y que fuiste escogido y el elegido por Dios para llevar este testimonio" Que lástima que no podamos examinar los testimonios para ver si los detalles entre cada visión eran idénticos! Yo no tengo duda alguna de que algunas personas que yo vi alucinar en la fiesta realmente vieron pichones volando sobre sus cabezas, mientras otros veían cuervos, y que algunos los veían volar al este y otros al oeste, otros al norte o al sur, o sin sentido; estoy casi seguro que las películas que recordaron eran distintas. Y de todas formas ellos vieron algo que en términos generales podría ser descrito de manera similar: "aves volando sobre nuestras cabezas, defecando; una película triste".

    ¿Porqué uno debería de aceptar tal tipo de testimonio?


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Was it a vision, or a waking dream?     - John Keats, Ode to a Nightingale